lunes, 10 de agosto de 2009
Saber estar
Las luciérnagas se ven mejor de noche
Tus ojos brillan en la mañana
Los guantes no secan las lágrimas
Tus manos no las dejan caer
Los discursos no sienten
Tus palabras se hacen actos
Los corrales encierran
Tus abrazos me protegen
Los pasajes bien lejos
Tu latido más cerca
Los fantasmas asustan
Tu risa los espanta
Las tortugas esconden su cabeza
Tu me haces hablar
Las cumbres solitarias
Tu me das un beso
Los gritos ensordecen
Tu voz me calma
La almohada escucha
Tu acompañas mis sueños
Los regalos bien envueltos
Tu… Tu sabes estar
viernes, 19 de junio de 2009
Mandamientos
Una y otra vez
Enfrentar el invierno
Encontrar la sonrisa
Deshacerse de lo marchito
Declararse ignorante
Aprehender de lo invisible
Confiar en extraños
Mirar la ciudad
Reconocer los músculos
Bailar sin pudor
Escuchar la poesía
Comprar nueva ropa
Compartir las miserias
Equivocarse una y otra vez
Una y otra vez
Hablar con verdad
Perdonarse las faltas
Emocionarse con lo mínimo
Buscar en los bolsillos
Manejar con lluvia
Despertar y levantarse
Cabalgar llorando
Mirar en los ojos
Tener fe
Quebrar la voz
Contar pa delante
Beber lo que viene
Equivocarse una y otra vez
Una y otra vez
domingo, 31 de mayo de 2009
Cum versare
Dos dedos menos en la mano
solo poder contar hasta tres
perder la pinza
partir en silencio
El otoño llega a todas partes
las ovejas siguen teniendo nombres
y la fiel memoria aun no traiciona
cada uno de los bautismos
En la chimenea las raices
la estufa y la tetera
soledades que se acompañan
para esperar el té
No hay nada que decir
los demás siguen siendo visitantes
paseos de lo que no fue
justificaciones del estar
Las castañas tostadas
esconden un corazón
entran a la boca
y al fin se digieren
No hay para que partir
este es el lugar
que lo manco no se pase a la sesera
ni el barro a los calcetines
Al fin la pasarela esta lista
ya no habrá río insondable
sino un camino colgante
hacia el nuevo destino
Guiso de papas
la mesa olorosa
sirvase pancito
que el pasado no volverá
solo poder contar hasta tres
perder la pinza
partir en silencio
El otoño llega a todas partes
las ovejas siguen teniendo nombres
y la fiel memoria aun no traiciona
cada uno de los bautismos
En la chimenea las raices
la estufa y la tetera
soledades que se acompañan
para esperar el té
No hay nada que decir
los demás siguen siendo visitantes
paseos de lo que no fue
justificaciones del estar
Las castañas tostadas
esconden un corazón
entran a la boca
y al fin se digieren
No hay para que partir
este es el lugar
que lo manco no se pase a la sesera
ni el barro a los calcetines
Al fin la pasarela esta lista
ya no habrá río insondable
sino un camino colgante
hacia el nuevo destino
Guiso de papas
la mesa olorosa
sirvase pancito
que el pasado no volverá
miércoles, 29 de abril de 2009
Asi tanto te extraño
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